Ayer salí a conocer uno de los cerros que está a escasos metros de casa de las Hermanas. Un cerro es una formación geológica que no suele superar los 100 metros de altura, considerándose entonces mas bajos que las montañas. Su base es extensa y su cima es redondeada o gastada. Al no poseer una altura tan pronunciada, ni pendientes tan grandes son de mucho mas fácil acceso que las montañas. En Lima, comenzaron ocupándose sus bases extensas, pero pronto falto espacio para los Peruanos que llegaban a la ciudad procedentes de la Sierra y la Selva, y terminaron ocupándose en su totalidad. Es sobre ellos donde se desarrollan muchos de los Pueblos Jóvenes de la periferia de Lima.
Os puedo garantizar que no es sencillo transitarlos.
En mi camino me encontré con tres jóvenes, de entre nueve y once años, que no
dudaron en hacerme una entrevista. Y sí, digo bien: entrevista. Cuatro preguntas
rápidas y directas, que casi parecían que estuvieran preparadas:
1. ¿Por qué haces fotos?
2. ¿España es grande?
3. ¿Está mas desarrollada?
4. ¿Los carros son diferentes?
Algunas muy difíciles de responder. Mis respuestas fueron poco
objetivas. Intente hablar de los que nos unía y evite hablar de lo que nos
diferenciaba, pero lamentablemente creo que no resulte del todo convincente.
Ellos continuaron jugando y yo continúe con mi recorrido.
Me di cuenta de lo difícil que me resultaba hablar aquí de mi realidad. Seguramente, no porque sean distintas, sino porque son injustamente desiguales. Decimos que Lima es una ciudad de contrastes. ¿Acaso no vivimos en un mundo lleno de contrastes? ¿Podremos hablar dentro de poco de realidades diferentes, pero donde en todas ellas la persona pueda desarrollarse en condiciones dignas?
Me di cuenta de lo difícil que me resultaba hablar aquí de mi realidad. Seguramente, no porque sean distintas, sino porque son injustamente desiguales. Decimos que Lima es una ciudad de contrastes. ¿Acaso no vivimos en un mundo lleno de contrastes? ¿Podremos hablar dentro de poco de realidades diferentes, pero donde en todas ellas la persona pueda desarrollarse en condiciones dignas?
Me encanta mucho lo de 'injustamente desiguales'. Es una clave de lectura de la realidad. Desiguales es claro, cada uno tiene su cultura, su manera de entender la realidad, de dar respuestas al día a día... No hay problema si se parte de la igualdad que da la dignidad de humana que hay que defender con fuerza.
ResponderEliminarEs importante descubrir lo que genera la injusticia. Eso quizá no se produzca allí, donde ahora te encuentras, sino aquí desde donde escribo, desde donde estoy yo. La desigualdad está bien mientras no genere injusticia. La diferencia a veces es el argumento donde se agarra el mantener la estructura injusta, o se coloca como argumento de lo imposible para poder mantenerla... hay que tener cuidado para que no nos engañen.
La clave es generar justicia en las relaciones humanas, en los derechos fundamentales, en la defensa de derechos, en la manera de entender las relaciones comerciales... entonces la desigualdad será valorada en su justa medida y no 'utilizada' para mantener privilegios de unos pocos.
Querido Raúl: Gracias por escribir y contarnos lo que vives cada día. Me ha hecho reflexionar que los pequeños con sus preguntas nos ayudan a ver la realidad de otra manera, las fotos, los coches, el desarrollo, tu presencia, símbolos que a pesar de ser a través de preguntas posiblemente guiadas nos señalan un camino a Karit. La foto nos retrata el " allí y nos ayuda " aquí" a entender y trnasformar lugares y colocarles rostros a los cambios y personas que tocamos, el coche es un medio de transporte que nos conduce y eso hacemos en la vida de Karit, conducirnos de diferentes modos para alcanzar el fin del desarrollo de los pueblos y las personas. Me encanta ver que os vais a descubrir esos nuevos caminos de solidaridad y que aún a pesar de subir escaleras como las que hay ahí teneis siempre la mirada en las riquezas del otro y en como ayudarnos a mejorar nuestro servicio de solidaridad pu de entrega en favor de los más desfavorecidos. Gracias, Raúl, es la preparación de Adviento que reañias y la mejor de las navidades que vivas desde los mas necesitados. Un saludo desde nuestra Delegación de Murcia. Hna. Arlyn
ResponderEliminarDesde luego que resulta difícil explicar la realidad de aquí, en España, a los de allí, en tu caso, en Perú. Es una de las cosas que me causaron gran impresión y que hasta que no las sientes con los cinco sentidos no eres totalmente consciente de la gran diferencia que existe por mucho que la veas en la tele. Esto siempre te genera un poco de tristeza al ver cómo a lo que aquí no se le da ninguna importancia, allí supone el mayor de los tesoros. Llevar apoyo a proyectos es desde luego muy importante, acercarnos estas injustas diferencias para sensibilizar a todos los que están y estamos a nuestro alrededor también.
ResponderEliminarÁnimo
Querido Rafa una vez más has dado en el clavo. Es importante, muy importante diría yo, lo que se hace allí con los proyectos, lo que supone visitarlos como hiciste tú y ahora Raúl en Perú y otros en distintos lugares, pero empieza a ser crucial el trabajo de sensibilización, de dar a conocer, de proponer cambios de valores, de maneras de interpretar la realidad, de situarnos correctamente ante las situaciones de injusticia, de vivir nuestro privilegio con generosidad... y todo esto hay que hacerlo aquí, ahora, en nuestros entornos. Además creo que hay que hacerlo de manera sistemática (educación), con compromisos concretos, con denuncias explicitas, con propuestas realistas y fundamentadas en lo posible y en la verdad. Mucha tarea... pero tenemos vuestro testimonio, contamos con profesionales que nos ayudarán, tenemos una organización que lo hará posible. Vamos a intentarlo.
EliminarBuenas amigos, totalmente de acuerdo con vuestros comentarios. Hay mucho que hacer desde nuestras delegaciones, desde nuestros ayuntamientos, desde donde trabajamos y vivimos, desde nuestras relaciones personales con los que nos rodean a diario. Esta realidad también es nuestra.
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