
( disculpas por las fotos torcidas, no hay manera de que se inserten correctamente en el blog, ¡corcholis!)


¡Como me
emocionaron estas palabras!, pues con tán sólo 8 años, a él y a sus dos otros
hermanitos, se les veía locos de alegría y
asombro observándonos colocar las
puertas, las ventanas, el techo,…
en definitiva, era delicioso reconocer en sus ojitos inocentes, negros y grandes, la felicidad que supone para ellos ver como de la noche a la mañana, a modo de champiñón, ha crecido una esperanzadora casita bonita sobre el vacío de su parcela …..y ….quizás también ….el caos y la tristeza de sus vidas.
en definitiva, era delicioso reconocer en sus ojitos inocentes, negros y grandes, la felicidad que supone para ellos ver como de la noche a la mañana, a modo de champiñón, ha crecido una esperanzadora casita bonita sobre el vacío de su parcela …..y ….quizás también ….el caos y la tristeza de sus vidas.

Faltan algunos
detalles como los sanitarios y el fregador para la cocina, pero gracias a
donaciones también de otros grupos y personas, el Señor está abasteciendo
poquito a poco a esta familia. Por cierto, Júcar de José Gálvez, liderado por
Edwin, muy amablemente nos han regalado el inodoro y el lavabo, así como los
azulejos del baño, ¡Ahí están los jóvenes carmelitas implicándose a tope en
este proyecto también, que orgullo! Gracias de corazón!,
Bueno, y por último añadir que a pesar de que en esta mini odisea se han sucedido tanto experiencias positivas como negativas (por ejemplo sin ir más lejos, a un chico de Dulanto le mordió un perro, sin
previo aviso, mientras cargaba arena), podemos sentirnos bien felices porque la
casa está finalmente en pie, y todos andamos vivos…más o menos….,

Y...que sepáis que todo Karit estará invitado, y ¡esperamos vuestra presencia aunque sea de espíritu!, porque sin vosotros esta aventura no hubiese siquiera empezado. Por eso, la familia, todos los colaboradores y yo misma, os felicito por este nuevo logro!
NOTA: En la rampita de acceso a la casa, a modo de mosaico, con ayuda de los chicos de Dulanto, dejamos con cariño sellado en el suelo el nombre de KARIT, un bienvenidos a una nueva vida para esta maravillosa familia!
