Hola de nuevo,
Tras un vuelo larguísimo y un tanto incómodo pero con la maravillosa compañía de Gustavo, un asistente peruano del chef Gaston en Madrid, toda una autoridad del mundo de la alta cocina internacional , el viaje ha sido mucho más ameno. Con casi 2 horas de retraso llegamos a Lima, gris y húmeda, macro urbe caótica llena de mucho movimiento humano y bastante tráfico "descontrolado". Allí me recogieron la Hna Carmen( de República Dominicana) y la Hna Rosalía ( de Indonesia) junto con el chófer Eulogio, regalándome un precioso ramillete de rosas rojas intensas, fue gracioso pues como avance tecnológico para encuentros en la "tercera fase", habían incorporado por vez primera una raqueta de tenis con mi nombre impreso para localizarme en el aeropuerto de forma más sencilla, así que los que me sigan como voluntarios atentos a las raquetas blancas con nombres!. Hasta la llegada al convento compramos unas flores para la celebración del Carmen al día siguiente, en un mercado abarrotado de pequeños puestos multicolor, por fin llegué al humilde convento con distribución de mini claustro y jardín al centro, para conocer al resto de las encantadoras Hermanas: Helena y Theresia de Indonesia y Cecilia de Valencia (Sueca).
Estoy muy contenta de su cálido recibimiento son muy cercanas, sencillas y cordiales, ya he estado hoy hablando con la Hna Carmen de algunos asuntos de nuestra agenda, pero dice que empezaremos con la faena tras la celebración de mañana. Por la tarde he visitado el taller para alumnos con discapacidades del centro Giraluna
que está adosado a nuestro convento y veis en la foto con una puerta enrejada negra, además aquí os los presento realizando sus tareas con la profesora Ana y la Hna Rosalía junto con algunos de sus trabajos artesanales situados sobre la mesita.
Os mando un grandísimo abrazo a
todos, se os quiere mucho por aquí, saludos y gracias desde Perú!!!
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