La Lima Vertical

Hola de nuevo amigos

Disculpad por este tiempo de silencio, pero he estado ocupada con el tema de la construcción en los cerros y la evaluación de las familias candidatas a recibir nuestra ayuda para la mejora de su vivienda.

Por si algunos no lo conocen, los cerros de Lima acogen a millones de personas sin recursos, que por no poder adquirir una vivienda en una parcela urbanizada y con servicios, se ven obligados a instalar sus chabolitas de cartón, palos y chapas, encaramándose a unas laderas con pendiente de infarto, muy húmedas y por donde baja la escorrentía cuando llueve, estos asentamientos humanos también conocidos como la Lima vertical, son una muestra de cómo el ser humano llega a sobrevivir en un entorno tan adverso.

 Las Municipalidades llevan unos años ya mejorando los accesos con unas escaleras de hormigón y acercando a algunas áreas el abastecimiento de agua, la red de desagüe y la electricidad. Pero la cosa va muy lenta y miles de seres humanos viven en estas condiciones tan precarias, que a uno le da una pena terrible descubrir, y de hecho, la pobreza se junta a veces con la falta de higiene y la desidia total, donde la persona se abandona hasta tal punto que la visita a algunas chabolas era casi insoportable, todas estas sensaciones juntas te generan sentimientos de gran tristeza y



desesperación, de impotencia al ver la magnitud de la situación y que uno casi no pueda hacer nada. Pero ahí es donde con el ejemplo diario de superación de las hermanas y otros carmelitas que me rodean uno coge fuerzas para sobreponerse e intentar hacer algo aunque sea poquito.

Un aspecto muy positivo es que se respira un espíritu de cambio y prosperidad que se refleja sobre todo en el auge del sector de la construcción y por consiguiente a la mejora de la calidad de la vivienda en casas del cerro que pertenecen a albañiles,  carpinteros, peones,….









Después de esta introducción, os quiero presentar a la familia  que va a recibir una ayuda de Karit para la mejora de sus condiciones de habitabilidad: Espichan Acuña. Se les va a intentar ofrecer una vivienda sencilla de unos 30 m2, luminosa, y bien aislada de la humedad, con cuartos separados  y el acceso, desde la vivienda, a un cuarto de aseo adaptado a las necesidades de Luis Ángel, el niño más pequeño de 4 años, que sufre de graves problemas de corazón y otras problemáticas asociadas, pero que está luchando como un gigante por sobrevivir. Luis tiene dos hermanitos muy dulces pero bien tímidos, José de 8 años y Carol de 11, Violeta es la madre y el padre Manuel, el único que puede trabajar algo pero que apenas les da para comer. Para ellos ando buscando y peleando un presupuesto que se ajuste a nuestras posibilidades económicas, lo cual es muy difícil por el aumento de precios generado por el boom constructivo del momento.

Pero estamos en ello y tengo fe de que algo podremos realizar, sobre todo aquí en Perú se aprende a tener paciencia y más paciencia.









Sobre todo muchas garcias a todos los que con su trabajo personal, apoyo y/o ayuda económica lográn que estas familias puedan ver la luz y tengan una nueva oportunidad, que sepais que están muy agradecidos por esta ayuda y que en el caso particular de esta familia un poco desestructurada, la ayuda de Karit es una señal de Dios, un milagro, para empezar de nuevo con una actitud luchadora y positiva. Simplemente GRACIAS