Maubara

Aquí, en Maubara, las hermanas tienen un orfanato de niñas, concretamente en la actualidad, treinta y cinco niñas. El término orfanato no es del todo correcto, ya que no todas las niñas que se encuentran allí carecen de padres, se trata, más bien, de una casa de acogida para niñas sin recursos, cuando digo sin recursos, en un lugar donde, de entrada, casi todo la gente tiene recursos limitados, podéis imaginar cómo es la situación de esas niñas. Aquí están contentas y se les nota, no obstante, me sonroja decir que todas sus pertenencias, facilitadas, en  casi su totalidad, por las hermanas, cabrían en mi maleta.

Las niñas se encuentran allí felices, aunque se observa, en algunas de ellas, un trasfondo de tristeza en su mirada, no es para menos, en ocasiones han sido maltratadas, o explotadas o han visto como su madre ejercía la prostitución o, como en el caso de una de ellas, había presenciado como su padre asesinaba a su madre. Sin la presencia de las hermanas y el apoyo que reciben de ellas el porvenir de estas niñas hubiera sido desolador.

 El jueves tenían fiesta y me resultaba enternecedor  ver como se arremolinaban y me acompañaban a la iglesia, donde, de nuevo, el coro cantó muy bien, es algo que vengo observando y en dónde más impresionado quedé de lo bien que lo hacían es el día de la virgen en Maubisse, donde había dos chicas que cantaban muy bien, una de ellas, yo creo, tenía una voz privilegiada.

Las hermanas  tienen en Maubara a las niñas hasta el final de lo que en España es la ESO y recientemente han iniciado una extensión de la acogida: actualmente hay tres niñas en Dili cursando estudios secundarios. Urge apoyar esta iniciativa para que las niñas continúen sus estudios, ya que, si no es así, las niñas regresan con el resto de sus familias, otra vez sin ingreso y son casadas a toda prisa o tienen peor destino. Por lo tanto desde aquí voy pidiendo ayuda para lo que será este proyecto.